Por Efraín Moreno Arciniega
Amigas y Amigos
“Harto os he dicho, miradlo”
Miguel de Cervantes.
Me pregunto abatido,
¿Cuántos somos los responsables de la lamentable tragedia en esa escuela de Torreón?
¿Qué estaba viviendo ese niño que nadie vio?
¿Qué vamos hacer ante esto?
¿O como muchas otras cosas tristes e indignantes que nos han sucedido, dejaremos también que ésta el tiempo se encargue de hacernos olvidar?
Mi solidaridad con todas estas familias que hoy viven un dolor del que no se han inventado palabras todavía para describirlo.
Ahora solo me queda en mi corazón la voz que me habla de Jorge Manrique:
«Tú, qué, por nuestra maldad,
Tomaste forma servil
Y bajo nombre;
Tú, qué a tu divinidad
Juntaste cosa tan vil
Como es el hombre;
Tú, qué tan grandes tormentos
Sufriste sin resistencia
En tu persona,
No por mis merecimientos,
Más por tu sola clemencia
Me perdona”.
¡Un saludo para todos con el cariño de siempre!