marzo 28, 2024

Por Sergio Mejía Cano

Algunos camaradas y un servidor, estábamos plenamente convencidos de que Donald Trump, al verse muy abajo en las encuestas para su reelección a la presidencia de los USA, haría algo rimbombante, y desde luego, volver a tomar a nuestro país como “punching bag”, con el cuento del muro fronterizo y los migrantes; pero ya vimos que no fue por ese lado, sino que el trancazo fue más fuerte e inesperado para la mayoría de los mexicanos.

Bien pudo haber sido una coincidencia la detención del ahora exgeneral  Salvador Cienfuegos Zepeda, con los tiempos electorales del vecino país del norte; sin embargo, ya se sabe que en política no hay coincidencias. Y si esta detención puede ayudar en algo al anaranjado presidente gringo, tal vez no le signifique de gran ayuda, pues Trump, no las trae todas consigo.

El problema ahora vendría a ser toda el agua que va a mover el que al señor Cienfuegos posiblemente sea juzgado en los USA, y desde luego, toda la turbiedad que generará su detención en nuestro país. Porque si bien, se presume su inocencia hasta que no se le demuestre lo contrario, de acuerdo a lo que se ha publicado en los medios, al parecer las acusaciones en su contra por parte de la fiscalía gringa, tienen una gran contundencia; de ahí que mucha gente ya dé por hecho el que sí haya estado involucrado en todo lo que se le achaca.

Pero mientras son peras o manzanas, por lo pronto ya salió embarrado el estado de Nayarit, porque se menciona al “H2”, quien fue abatido en la ciudad de Tepic, mediante una artillería pesada que se dice, las balas atravesaron bardas, techos y paredes, debido a la fuerza del calibre de una arma hasta antes jamás utilizada en operativos para apresar delincuentes ligados al narcotráfico. Tal vez se trataba de silencias al H2 a como diera lugar y no hablara después en caso de quedar con vida.

Hace apenas unos días se dio a conocer la noticia en varios portales de internet, de que los abogados del exfiscal nayarita Edgar Veytia, habían pedido una revisión de su caso, por existir la posibilidad de que se le redujera su condena; pero tal vez con lo que se dice en los medios de que el señor Cienfuegos protegía al H2 en Nayarit, mientras no se cayó del mecate y fue abatido, es bueno recordar que todo esto sucedió cuando el señor Veytia estuvo en el cargo de Fiscal General del Estado de Nayarit; así que posiblemente de nueva cuenta le salgan a relucir al señor Veytia otras cosas por ahí. Tal vez, aunque quién sabe.

Y a propósito de don Edgar Veytia, es bueno recordar también cómo el entonces gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval Castañeda, negó rotundamente saber a lo que se dedicaba su fiscal general, que ignoraba si andaba en malos pasos, etcétera, lo mismo que aconteció con Felipe Calderón Hinojosa, cuando fue detenido también allá en los USA, el señor Genaro García Luna, de quien el ahora expresidente Calderón, negó saber que su supuesto brazo derecho estaba hundido hasta el cuello en cuestiones del tráfico de drogas.

Entonces, ahora en el hipotético caso de que se llamara a declarar al expresidente Enrique Peña Nieto respecto al actuar de su Secretario de la Defensa Nacional, posiblemente salga con la misma cantaleta de que él –Peña Nieto- no sabía nada de nada de lo que hacía el señor Salvador Cienfuegos, que niegue todo. Aunque podría existir esta posibilidad debido a que se dice que, así como un presidente o gobernante de cualquier nivel podría ser el hombre más enterado, también podría ser el más engañado; así que lo mejor en estos casos, es hacerle al tío Lolo.

Lo que sí queda para pensar, es qué le dijeron a Andrés Manuel López Obrador (AMLO), cuando siendo ya presidente electo, se reunió precisamente con Salvador Cienfuegos, Secretario de la Defensa, y el Almirante Vidal Francisco Soberón Sanz. Porque si recordamos, durante buen tiempo de su campaña, AMLO señalaba constantemente que el ejército debería volver a sus cuarteles, pues ese era su lugar en tiempo de paz; sin embargo, después de la reunión con los entonces mandamases de las fuerzas armadas, salió con que sí era necesario que los militares y marinos anduvieran en las calles y no en los cuarteles; incluso hasta lanzó la iniciativa de ley para facultar a las fuerzas armadas a patrullar las calles.

Algo le habrán dicho a AMLO tanto el entonces General Cienfuegos Zepeda, así como el Almirante Soberón Sanz, para que cambiara tan radicalmente de parecer, aprobando que el ejército y la marina anduvieran haciendo labores policíacas.

Sea pues. Vale.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Verificado por MonsterInsights